La noche del domingo 15 de enero, el ministro de Ambiente, Manuel Pulgar Vidal, declaró en Canal N que no encontraba el informe elaborado por el Minam en noviembre, con importantes observaciones al Estudio de Impacto Ambiental del Proyecto Conga. La difusión de ese informe, por IDL-Reporteros, tuvo un efecto importante en la suspensión del Proyecto.
“Lo primero que hice fue pedir una copia del informe y recibí la información que ni en Asesoría Jurídica y ni en Trámite Documentario (del ministerio) se había canalizado ningún informe de esa naturaleza y, en consecuencia, no hay en mi cartera un documento oficial de este tema”, dijo Pulgar Vidal.
El dato fue recogido de inmediato por los medios. Que el actual ministro de Ambiente afirmara que no existía oficialmente el documento que enfrentó en noviembre a su sector con el ministerio de Energía y Minas, parecía cambiar todo el debate sobre el asunto. Al parecer, según lo que decía Pulgar Vidal, un documento fantasmal había suspendido Conga.
Ayer la cosa se calentó todavía más. El ex ministro Ricardo Giesecke, apareció declarando en Perú.21 que, en efecto, nunca existió un informe sobre Conga y que todo lo que hubo fue un “documento interno, una ayuda memoria”. Además, sugirió que “para saber más sobre qué pasó con ese informe, habría que conversar con el ex premier Salomón Lerner”.
¿Cuál es el término ambientalmente correcto? ¿Soplada de pluma, quitada de cuerpo, mieditos?
Ministro y ex ministro, disipen dudas y temores. IDL-Reporteros les entrega su propio informe. Y como Pulgar Vidal o Giesecke podrán leer, el título bajo el membrete del Minam no dice ‘memorándum’, ‘ayuda memoria’, ni ‘documento interno’ sino un muy claro ‘Informe 001-2011’.
Este Informe, que publicamos aquí junto a una ayuda memoria, es el que se entregó al entonces ministro Giesecke para su firma; y que luego él mismo llevó al ahora ex primer ministro Salomón Lerner; y que eventualmente llegó a manos del presidente Ollanta Humala.
En la redacción de este documento, como ha relatado el ex viceministro de gestión ambiental, José de Echave, intervinieron 25 funcionarios, algunos con rango de director general, y su elaboración tomó 16 días y sus noches, uno más de lo que establecía el plazo trazado por el Minam. Todos esos funcionarios, bajo la dirección de de Echave se dedicaron exclusivamente a ese trabajo durante más de dos semanas insomnes.
Durante ese proceso, se revisó todo el Estudio de Impacto Ambiental del proyecto Conga, y se sostuvo encuentros con varios funcionarios de la empresa Yanacocha. Es más, de Echave ha referido que el propio Giesecke le encargó que se dedicara a tiempo completo a este estudio.
Luego que el Informe se hizo público, el ex ministro de Energía y Minas, Carlos Herrera, lo calificó de “tremendista”. “Es una redacción tremendista. Esas sugerencias se pueden dar en un vocabulario mucho más constructivo. Hay gente que tiene un estilo tremendista y una misma situación puede ser descrita en otros términos”, dijo Herrera.
El propio Giesecke, en una entrevista del 27 de noviembre del año pasado, en Canal N, defendió el informe. “El tremendismo depende de con que anteojos lo mire uno. Pero en principio (el informe) no pretendía ser tremendista”, afirmó. Luego, cuando se le preguntó si respaldaba este Informe, respondió: “Pero claro. Por supuesto. Yo lo he trabajado, yo me he reunido, yo he pasado noches enteras trabajando todo este tema. Pudiendo hacer un resumen que represente algo útil para el país”. (Ver entrevista desde 10′ 11″ a 10′ 47″)
Entonces, ¿por qué el ministro Pulgar Vidal no pudo encontrar el informe? ¿O es que no quiso encontrarlo? Y si es así, ¿por qué?
IDL-Reporteros lo buscó para conversar sobre el tema, pero su jefa de comunicaciones, Cristina Miranda, respondió, que tenía “la agenda llena”. Claro, buscar el Informe toma tiempo. Ahora, que se lo hemos encontrado, puede sentarse a leerlo con detenimiento.