[Actualización a las 19:00, del 20 de setiembre de 2019: Carta notarial de Humberto Abanto y Respuesta de IDL-Reporteros]
Nuevos testimonios de colaboradores eficaces y testigos, contenidos en la investigación fiscal sobre los Cuellos Blancos, revelan aspectos hasta ahora desconocidos del papel que desempeñó José Luis Cavassa Roncalla en las elecciones del Consejo Nacional de la Magistratura (CNM) en 2018; y arrojan luces interesantes sobre las extrañas (y clandestinas) visitas del abogado Humberto Abanto al encarcelado Walter Ríos para favorecer a Cavassa.
Cavassa Roncalla fue el intermediario de José Luna Gálvez – dueño de la universidad Telesup y fundador del partido político Podemos Perú – para controlar el CNM, según lo señalan los testimonios del colaborador eficaz 2109-2018 y los testigos protegidos 08-2018 y 02-2019. Cavassa ofreció a Guido Aguila y a Iván Noguera pagos mensuales a través de la universidad de Luna, disfrazados como asesorías y otros servicios, para asegurar que votaran según sus instrucciones en procesos de selección y nombramiento de jueces, fiscales, y de otros funcionarios claves. Por ejemplo, la jefatura de la ONPE.
Cavassa manipuló el proceso de elección a la presidencia del CNM en 2018 para asegurar que ganara Orlando Velásquez Benites, según declaraciones de los testigos. Antes de la elección, Cavassa se reunió con Velásquez para ofrecerle los votos de Guido Aguila, Iván Noguera y Julio Gutiérrez. Con ellos, Velásquez podía ganar por unanimidad, como finalmente sucedió. Con esa intervención, Cavassa demostró poder controlar los procesos del CNM.
José Luis Cavassa Roncalla se hizo notorio por primera vez en el 2000, cuando fue denunciado por la falsificación de firmas para la inscripción del partido fujimorista “Perú 2000”, mientras ocupó el cargo de gerente electoral de la ONPE.
Actualmente también está involucrado en el caso Lava Jato, por las coimas de una obra de Áncash. La fiscalía anticorrupción determinó que fue uno de los intermediarios del expresidente regional, César Álvarez, para el pago de sobornos de Odebrecht por la adjudicación de la carretera Carhuaz – Chacas – San Luis. En las elecciones de 2016, fue parte del equipo de campaña de PPK. Antes de ser puesto en prisión preventiva por el caso Lava Juez, Cavassa trabajaba como asesor informático en la universidad Telesup.
Control de votos en el CNM
Según las declaraciones del testigo protegido 02-2019, el 20 de febrero de 2018, Vladimir Velásquez, hijo de Orlando Velásquez, tuvo un almuerzo en San Ceferino, restaurante de San Isidro, al que también asistieron Luis Díaz Asto, exjefe de prensa de Duberlí Rodríguez, el juez Abel Concha y Enrique Vidal, “el negro Vidal”, experiodista montesinista. En el almuerzo se conversó sobre la elección de Orlando Velásquez.
“Le comentaron a Vladimir el resultado de 4 a favor de Orlando Velásquez y 3 en contra […] Allí se mencionó que lo más probable es que se mantenga la misma votación, por el motivo de los tres votos de Guido, Noguera y Gutiérrez”, contó el testigo protegido 02-2019. Quedó claro que tres consejeros votaban en grupo (Aguila, Noguera y Gutiérrez), y para conseguir sus votos se debía hablar con José Luna Gálvez. “Uno de los presentes indicó que conocía una persona muy cercana a ese grupo y que podía preguntar si era posible una reunión, la persona que dijo ello fue el Dr. Abel Concha, sin especificar quién era el contacto en ese momento”. Abel Concha llamó a Vladimir ese mismo día en la noche y le dijo que “su amigo” estaba dispuesto a organizar una reunión con Luna Gálvez en unas horas.
A las 11:00 de la noche se encontraron Abel Concha y Vladimir Velásquez en una calle de Miraflores. Concha le presentó a su amigo, Willy Serrato, y juntos fueron al local de Telesup de la Av. Arequipa en carro. “Al llegar al lugar, Willy Serrato efectuaba coordinaciones por teléfono, estaban esperando las respuestas, para luego ver que sale una persona desde el interior de la Universidad y sube al vehículo donde lo estaba esperando frente a la Universidad”, señaló el testigo. Allí recibieron a una persona que se identificó como “Cavassa”, a quien Serrato le decía “PPK”. Cavassa indicó que tenía un mensaje de José Luna para darle directamente a Orlando Velásquez.
El entonces consejero aceptó recibirlo en su departamento de Miraflores, a donde fueron con Vladimir y Willy Serrato. “El señor Cavassa dejó bien en claro que hablaba en representación del señor Luna Gálvez y además dio a entender que el resultado de las elecciones dependía de los tres consejeros Gutiérrez, Guido y Noguera”, contó el testigo. Cavassa le dijo que le podía dar los tres votos que le faltaban para ganar por unanimidad si quedaba en deuda con Luna Gálvez y ponía a Noguera como vicepresidente de su lista. Velásquez, sin embargo, aclaró que la candidatura a vicepresidencia no dependía de él. “Esto restó fuerza al argumento del señor Cavassa, pero insistió en que podía ser elegido por unanimidad al día siguiente con la venia del señor Luna Gálvez y los tres consejeros”, relató el testigo. El 21 de febrero de 2018, Velásquez fue elegido por unanimidad presidente del CNM.
Favores entre Ríos y Cavassa
Ante la Fiscalía, Cavassa Roncalla reconoció que conocía a Walter Ríos desde el 2012. Cuatro años después, Ríos le pidió que apoye su candidatura para presidente de la Corte Superior de Justicia del Callao. En febrero de 2018, Ríos le solicitó otro favor: quería que apoye esta vez a la candidatura de Orlando Velásquez para que sea elegido como presidente del CNM. IDL-Reporteros publicó, en julio del año pasado, un audio donde Ríos le comentaba a su esposa que tendría una reunión con Cavassa para, a través de él, tender puentes con los consejeros Aguila y Gutiérrez, para la elección de Velásquez [Ver: Corte y Corrupción].
En febrero, Cavassa también le consultó a Ríos sobre un proceso judicial que estaba demorando en la Corte del Callao. En conversaciones entre Walter Ríos y su chofer John Misha, se manifiesta que Ríos dispuso que el juez Orestes Vega Pérez, quien también está siendo investigado por la Fiscalía por el caso Cuellos Blancos [Ver: Negociados en la Corte], se haga cargo del proceso laboral que interesaba a Cavassa.
El 17 de febrero, Ríos envió un sobre manila con su asesor Gianfranco Paredes, a la casa de José Luis Cavassa. En un escrito remitido por Walter Ríos desde el penal a la Fiscalía, señaló que “remití a través de mi exasesor Gianfranco Paredes, un sobre conteniendo una sentencia, emitida en el marco de un proceso laboral que se tramitó ante el Despacho del juez Orestes Augusto Vega Pérez, dicho sobre conteniendo la sentencia, fue remitido al domicilio del Sr. José Luis Cavassa Roncalla”. Cavassa se lo agradeció. La misma versión fue relatada por el colaborador eficaz 108-2018.
Obstaculizar la investigación
En marzo de este año, diversos medios informaron que Humberto Abanto, entonces abogado de José Luis Cavassa y de César Álvarez, se había reunido con Walter Ríos en el penal Ancón I, sin registrar la visita. La reunión no fue consignada en el Sistema de Control Biométrico ni en los cuadernos de control manual de visitas de abogados; solo fue revelada por las grabaciones de las cámaras de vigilancia del área de Prevención del Penal, obtenidas en una diligencia dirigida por la fiscal Sandra Castro. El INPE decidió iniciar una investigación para identificar a los responsables de esta irregularidad.
Lo que no se supo en ese momento y ahora se sabe es la razón de esta clandestina reunión. Abanto alegó que solo recibió de Ríos un manuscrito de queja contra el juez que llevaba su caso, debido a que Ríos no tenía con quién enviarlo. Y ese día de marzo, Ríos le preguntó por el cargo del documento. Sin embargo, según el nuevo testimonio de un testigo protegido, el objetivo real de Abanto fue presionar a Walter Ríos “para organizar y planificar determinados actos y declaraciones en contra del Dr. Castillo Alva”.
¿Por qué contra él? Porque quería que Ríos declarara que el “Pepelucho” de los audios del caso Lava Juez era Castillo Alva y no Cavassa Roncalla, patrocinado de Abanto. Los exabogados de Ríos Montalvo lo explicaron así a la Fiscalía:
Juan Miguel Servión Nakano comentó que, cuando fue abogado de Ríos, en agosto de 2018, pudo conocer que “algunas personas del Pabellón del penal de Ancón I, donde se encuentra actualmente recluido, se le acercaron para pedirle ayuda con su declaración al [para] señor José Luis Cavassa Roncalla a fin de mejorar su situación legal y señale, entre otras cosas, que la persona descrita como “Pepe Lucho” era el abogado José Luis Castillo Alva”. Ríos le dijo a Servión que casi todos los internos del pabellón donde estaba -incluido César Álvarez- eran amigos de Cavassa.
Alex Ganoza Céspedes, otro exabogado de Ríos, relató que tuvo conocimiento de que César Álvarez era quien tenía control absoluto del pabellón de Prevención del penal. “El Dr. Ríos me llegó a comentar que venía recibiendo presiones del señor César Álvarez para cambiar su versión a favor del señor José Luis Cavassa Roncalla y perjudicar a José Luis Castillo Alva”. Walter Ríos cedió.
¿Cuál era el plan? Ríos le pidió a Servión a principios de enero de este año que lo pusiera en contacto con Castillo Alva para pedirle que elaborara un habeas corpus a favor de Luis Arroyo Rojas, uno de los internos del pabellón, para calmar un poco las presiones. “Como consecuencia de ello, me reuní con Castillo Alva y le transmití el mensaje, quien al cabo de 15 días me remitió en archivo digital la demanda de habeas corpus culminada”, indicó Servión.
Castillo Alva entregó el habeas corpus ante la Fiscalía como muestra de las presiones que estaba recibiendo Ríos. Según el testigo protegido 04-2018, el 19 de marzo, mientras Castillo Alva se encontraba en un Hotel de San Isidro con cuatro personas, le entregaron un escrito de Humberto Abanto, en el que renunciaba a patrocinar a Cavassa Roncalla. Abanto le pidió a Castillo Alva, como condición para entregar la renuncia, que no acuda a la Fiscalía de Crimen Organizado del Callao al día siguiente a brindar declaraciones ampliatorias sobre los hechos que había denunciado. Para el testigo protegido, esto fue una confirmación de que Abanto estaba presionando a Ríos con el fin de que cambie de versión. El escrito de renuncia también fue entregado a la Fiscalía.
El abogado Servión recuerda que le propuso a Ríos poner en conocimiento de las autoridades las presiones que estaba recibiendo, pero Ríos le respondió que no era necesario.
Con base en estos hechos, este martes 17 de setiembre la fiscal Rocío Sánchez, de la Fiscalía Supraprovincial Contra el Crimen Organizado, dictó una disposición que incorpora nuevos elementos de convicción y amplía la investigación del caso los Cuellos Blancos.
[Actualización a las 19:00, del 20 de setiembre de 2019: Carta notarial de Humberto Abanto y Respuesta de IDL-Reporteros]
El día de ayer, 19 de septiembre, llegó a IDL-Reporteros una carta notarial del abogado Humberto Abanto Verástegui. La publicamos a continuación junto con la respuesta de IDL-Reporteros.
Respuesta de IDL-Reporteros
IDL-Reporteros ratifica el contenido y la presentación de su reportaje “Control y obstrucción”. Dicho reportaje es parte de la cobertura continua del caso de los llamados “Cuellos Blancos del Puerto”, también conocido como “Lava Juez”.
El reportaje de “Control y obstrucción” tuvo como base la investigación fiscal que lleva a cabo la fiscal provincial Rocío Sánchez. Cada uno de los hechos mencionados está contenido en documentación fiscal que refleja diligencias realizadas de acuerdo con la normativa legal e incluyen declaraciones de testigos, protegidos o no.
Luego de la publicación de IDL-Reporteros, La República publicó parte de esos documentos fiscales. Y en la noche del jueves 19 de septiembre, el noticiero de AméricaTV cubrió también el tema con un despacho que aportó información adicional.
El tono histérico de la carta de Abanto revela – involuntariamente, claro está –, su alarma ante el progreso de una investigación en curso. No se atreve a negar su presencia el 1 de marzo en el área de prevención del penal, donde estaban Álvarez junto con Walter Ríos, entrevista que no fue registrada y de la que solo se supo cuando salió un vídeo que tuvo que ser reconocido por el INPE. Esta institución describió el incidente de la siguiente manera:
“De las imágenes de las cámaras de video vigilancia del área de Prevención se advierte que el abogado Abanto no solo se entrevistó con el interno César Álvarez, sino también con el interno Walter Ríos Montalvo. Sin embargo, esta última visita no aparece registrada en el sistema de control biométrico ni en los cuadernos de control manual.
Se ha dispuesto que los órganos disciplinarios del INPE realicen las investigaciones para determinar las responsabilidades a que hubiere lugar”.
De otro lado, el ex abogado de Wálter Ríos, Juan Miguel Servigón dijo lo siguiente en la declaración testimonial que dio el 4 de mayo pasado en el Ministerio Público, cuando la fiscal Rocío Sánchez le preguntó si sabía de visitas hechas por Abanto a Wálter Ríos en el Penal de Ancón I:
“De manera directa no lo llegué a saber, pero por versión del mismo Dr. Walter Ríos llegamos a conocer de que en algunas oportunidades cuando el doctor Humberto Abanto Verástegui visitaba al señor César Álvarez aprovechaba para visitar y conversar con el señor Walter Ríos quien nos llegó a decir que deberíamos aprender del doctor Abanto Verástegui debido a que no le cobraba honorarios profesionales al señor César Álvarez; debo señalar que en marzo de este año nos enteramos por los medios de comunicación de la visita que había efectuado el doctor Abanto al señor César Álvarez y al señor Walter Ríos”.
¿Está claro, entonces? Y también debe quedar claro que nuestras investigaciones, por supuesto, continuarán.
Como aporte informativo adicional, IDL-Reporteros publica ahora partes importantes del documento fiscal de este 17 de septiembre, sobre “Incorporación de Elementos de Convicción y Ampliación de Hechos”, para terminar de aclarar en profundidad la verdad de los hechos descritos en nuestro reportaje.
