“En mi gobierno los ministros y políticos ganaban la mitad pero hicieron el doble de obras”.
Al atacar el aumento de salarios a los ministros dispuesto por el actual gobierno, el ex presidente Alan García lanzó, este 19 de febrero, una afirmación con estructura matemática que despierta inevitablemente el asombro.
El doble con la mitad. Es decir, cuatro a uno. ¿Tan buenos fueron los del 2006 al 2011? ¿Y tan austeros también?
“Resulta escandaloso que un ministro gane 40 salarios mínimos, lo que es la distancia más injusta en todo el continente”, había dicho García días antes, el 11 de febrero, a través de su cuenta de Twitter.
Muchos han estado de acuerdo con esta parte del argumento. Pero con la otra, con el cuadro de la eficiencia espartana y abnegada de los ministros apristas, hay algo así como una colisión con las memorias de todos los que aún conservan una aceptable integridad neuronal.
Pero el hecho es que, en efecto, García redujo el sueldo a sus ministros. Y pese a los diversos escándalos en que se vieron envueltos, permanecieron con el sueldo reducido hasta el final de su período.
Sin embargo, varios manifestaron señales elocuentes de prosperidad. ¿Cómo lo hicieron?
Esta es la primera de una serie de notas que buscará responder, con precisión, esa pregunta.
Y empezaremos con uno de los ministros más versátiles, interesantes y pintorescos del gobierno de García: con Hernán Garrido Lecca.
El 4 de enero de 2013, Hernán Garrido Lecca compareció ante la llamada Megacomisión presidida por el congresista Sergio Tejada. Fue un interrogatorio interesante, sobre todo en el siguiente intercambio.
–¿En ningún caso tuvo contratos con alguna empresa que se hubiera podido beneficiar con el gobierno anterior o con la cartera que usted presidía? – le preguntó Sergio Tejada.
– No – respondió Garrido Lecca.
– ¿Ya cuando no era ministro? –insistió Tejada.
– No, no, no. Para nada. No he tenido ningún trato con el Estado.
Apenas un mes después de esa fecha supimos que Garrido Lecca mintió. Ahora conoceremos cuánto.
El 11 de febrero de 2013 IDL-Reporteros reveló que Garrido Lecca actuó como lobbyista de la empresa israelí de asesoramiento militar Global CST, que culminó en la suscripción de un contrato millonario con las Fuerzas Armadas.
En otra nota, el 10 de septiembre de 2013, IDL-R informó que en 2010 Garrido Lecca fue consultor de Savia, el consorcio colombo-coreano que compró Petrotech.
Esos no fueron ni de lejos los únicos casos en los que Garrido Lecca trabajó para compañías que buscaban lograr o mejorar una relación comercial con el Estado durante la presidencia de Alan García.
En los dos últimos años del gobierno aprista, entre 2009 y 2011, Garrido Lecca realizó consultorías para 14 compañías (nacionales y extranjeras), por las que cobró un total de 3 millones 255 mil 054 soles, según lo que declaró a la Sunat. Ese monto equivale a 15 años de trabajo como ministro de Estado, considerando el salario mensual que recibió, 15 mil 600 soles.
Lo importante es que ocho de esas catorce empresas o grupos económicos tuvieron una relación contractual con el Estado durante el último gobierno de Alan García. Por esas consultorías Garrido Lecca ganó 2 millones 081 mil 341 soles.
Ayer ministro, hoy consultor
En 2008, durante el gobierno aprista, Proinversión le otorgó la concesión para el transporte y distribución de gas natural en Ica al consorcio conformado por la Empresa de Energía de Bogotá (EEB) y Transportadora de Gas del Interior (TGI) de Colombia.
La concesión se dio por 30 años e implicaba una inversión de 200 millones de dólares. A la firma del contrato, en marzo de 2009 en la localidad de Humay, en Ica, asistieron el presidente Alan García y Mónica de Greiff, presidenta de la Empresa de Energía de Bogotá.
Hernán Garrido Lecca empezó a trabajar – según la fecha de los pagos que registró en la Sunat– para el consorcio colombiano el mismo año que este suscribió el contrato de concesión con el Estado.
Fuentes familiarizadas con Garrido Lecca refirieron que este fue convocado por Mónica de Greiff- con quien, según dicen, tiene una vieja amistad- para resolver los problemas sociales que pudieran surgir por el tendido de redes para la distribución del gas.
Garrido Lecca trabajó para ellos desde 2009 hasta el fin del gobierno de García, el 2011. Según lo que declaró a la Sunat, el ex ministro cobró en total 537 mil 182 soles.
La empresa cambió tres veces de nombre en seis años. El contrato de concesión fue suscrito bajo el nombre de Transcogas. Luego cambió a Congas y terminó como Contugas. Pero, según información proporcionada por la propia empresa, lo único que cambió es el nombre y nada más.
Por esa razón, los pagos que recibió el ex ministro provienen de tres nombres diferentes pero de una sola fuente. De Contugas recibió pagos por un monto de 316 mil 913 soles, fragmentados en 19 pagos de alrededor de 16 mil soles. El primero se realizó el 14 de julio de 2009, pocos meses después de la suscripción del contrato de concesión.
A través de Transcogas el ex ministro cobró 110 mil 016 soles; y por Congas 110 mil 252 soles.
Según la versión de la compañía, Contugas en este caso, Garrido Lecca se desempeñó como asesor “en aspectos vinculados con mecanismos y estrategias de gestión social en el área de influencia del proyecto en el departamento de Ica”. Por esos vagos “aspectos” sostienen haberle pagado 67 mil 222 dólares que al tipo de cambio de ese momento (S/.2.87) era 192 mil 927.
Los pagos se hicieron, según la compañía, en los periodos de noviembre de 2009 a marzo de 2010, y de noviembre de 2010 a abril de 2011 (el mismo mes que hubo elecciones generales en el país). “Dichos servicios fueron totalmente liquidados en el año 2011; desde entonces no existe ningún tipo de vinculación comercial con el señor Garrido Lecca”.
Lo interesante es que cuando se compara los pagos admitidos por Contugas con los montos declarados por Garrido Lecca a la Sunat (537 mil 182 soles), hay una enorme discrepancia de 344 mil 255 soles.
El caso de Paita
Durante el periodo en que trabajó como consultor y facilitador a cuenta de los colombianos, el ex ministro tuvo también ingresos como consultor de otra corporación: Andino Investment Holding, que agrupa a 14 empresas relacionadas con infraestructura portuaria, logística y servicios marítimos.
Cosmos Agencia Marítima es una de las empresas del holding que en 2009 ganó la concesión del puerto de Paita por 30 años, en consorcio con otras dos compañías: Tertir – Terminais, y Translei, bajo la denominación Terminales Portuarios Euroandinos (TPE).
La suscripción del contrato fue el 9 de setiembre de 2009, y el monto global de la inversión fue calculado en 237 millones de dólares.
El proceso, realizado a través de Proinversión, fue cuestionado por el partido nacionalista, entonces en la oposición. La congresista Marisol Espinosa, hoy vicepresidenta de la República, denunció que Proinversión había direccionado el proceso de concesión para favorecer a Terminales Portuarios Euroandinos.
“En este caso la directora de Proinversión ha cometido colusión, es decir, si yo me pongo a favor de una de las partes y fabrico el diseño del proceso a la medida de una de las empresas, es colusión”, acusó Espinoza, en declaraciones a la prensa el 16 de setiembre de 2009, una semana después de la suscripción del contrato.
La bancada nacionalista denunció penalmente, ante el Ministerio Público, a Cayetana Aljovín, entonces directora ejecutiva de Proinversión. En el Congreso decidieron no investigar el caso.
Desde el Ejecutivo, el entonces presidente del Consejo de Ministros, Javier Velásquez Quesquén, respaldó la gestión de Aljovín. “La concesión del puerto de Paita ha sido absolutamente transparente, tanto la concesión como la suscripción del contrato, (…) nosotros respaldamos a nuestra jefa de Proinversión así como al ministro (de Transportes)”.
Con el nuevo gobierno, sin embargo, la comisión de Transportes y Comunicaciones del Congreso conformó un subgrupo de trabajo para investigar el caso, integrado por los congresistas Rogelio Canches, Roberto Angulo, Carlos Tubino y Enrique Wong.
En enero de 2012, el subgrupo presentó un informe preliminar que concluyó que Proinversión modificó las bases del concurso para favorecer a Terminales Portuarios Euroandinos. Los congresistas detectaron, entre otras cosas, que el consorcio alcanzó su inscripción en Registros Públicos después de ganada de la concesión.
Sin embargo, dos años después de la presentación del informe, este aún no ha sido puesto a debate en la comisión parlamentaria, que está a cargo del congresista nacionalista Leonidas Huayama.
Cayetana Aljovín, esposa de Fritz Du Bois, hoy director de El Comercio, es ahora gerenta general de Llorente & Cuenca, la multinacional de relaciones públicas e “imagen corporativa”, entre cuyos representados han figurado notorios protagonistas de los casos de corrupción empresarial perpetrados durante el régimen de Fujimori y Montesinos.
Hernán Garrido Lecca apareció como consultor de Andino Investment Holding y dos empresas del grupo, Triton Maritime Services y Cosmos Agencia Marítima, al año siguiente que esta última ganara la cuestionada concesión con el Estado.
El ex ministro cobró en total 538 mil 716 soles por todas las consultorías hechas en 2010 y 2011. A través de Andino Investment Holding ganó 211 mil 950 soles; por Cosmos Agencia Marítima 295 mil 066 soles; y por Triton Maritime Service (Trimser) 31mil 699 soles.
Según los registros del MEF, Trimser suscribió un contrato con la Marina de Guerra por más de 60 mil soles en 2009.
IDL-R preguntó al holding sobre el trabajo que desempeñó el ex ministro. Solo en el caso de Cosmos hubo respuesta. “Garrido Lecca no ha trabajado para la compañía. No hay registros de eso”, indicó Fiorella Cicirello, asistente del gerente general de la compañía.
Esto resulta contradictorio, puesto que los registros de Sunat dicen los contrario. Según lo que declaró Garrido Lecca, Cosmos le pagó más de 295 mil soles.
Un detalle curioso es que Andino Investment Holding tiene en su directorio a otro ex ministro de Alan García. Se trata del ex ministro de Economía y Finanzas, Luis Carranza.
Sucede que Carranza y Garrido Lecca sostuvieron una vibrante enemistad durante el tiempo que coincidieron en el gabinete ministerial. “¡A pesar de Carranza, el Perú avanza!”, picaba Garrido Lecca, mientras Carranza no solo se negaba a hablar con HGL sino a permanecer en la misma habitación que este. Algo parecido sucedió en la vida empresarial: cuando Carranza empezó a trabajar para el holding, en 2012, Garrido Lecca ya estaba fuera de él.
Pero ahí no terminaron ni las consultorías ni las historias, como veremos en la siguiente entrega de esta investigación♦