El jueves 28 de octubre pasado, un correo electrónico de Francisco, ‘Paco’, Miró Quesada Rada dirigido a toda la Redacción de El Comercio atizó ansiedades entre los periodistas.
El correo decía lo siguiente:
Estimados señores:
Coincidiendo con el proceso de reforma de la organización de la Redacción que está en curso con la consultoría de Cases i Associats, he tomado la decisión de poner en reestructuración las siguientes secciones: Luces, Metropolitana, Regiones, Mundo y Suplementos.
Ya que en los próximos días estaré viajando a la Asamblea General de la Sociedad Interamericana de Prensa SIP en Mérida, México, para efectuar los cambios delego la responsabilidad en los editores Centrales Martha Meier y Hugo Guerra, quienes el día jueves 04 de noviembre ejecutarán el plan respectivo.
Agradezco de antemano su apoyo en esta delicada gestión.
Atentamente,
Francisco Miró Quesada R.
Director
Pero el jueves 4 solo uno de los dos delegados estuvo en la redacción para ejecutar el plan mencionado por Paco MQ. Y para varios, se trató, en efecto, de una ejecución. Hugo Guerra anunció solo (ante la ausencia de Martha Meier), despidos y rotaciones en cinco secciones del diario y la revista Somos.
El editor a.i. de Somos, Diego Otero, perdió su puesto pero no el empleo. El nuevo editor es Eduardo Lavado, hasta ese momento editor de Suplementos. Fue el segundo cambio de editor en pocos meses, luego de que en mayo fuera despedido el veterano editor de la revista, Óscar Malca, que llevó a la renuncia de algunos de sus columnistas más prestigiados, como Rafo León.
Aparte de Somos, varias otras secciones sufrieron cambios y despidos. Los editores de Mundo (Carlos Novoa), Regiones (Martín Huancas), Metropolitana (Adolfo Bazán), Luces (Carlo Trivelli) y Suplementos, fueron cambiados. Huancas, el editor de Regiones, fue despedido un día después, incluso antes que llegaran a ofrecerle el curso de coaching que, según fuentes dignas de confianza, era la condición para su estabilidad laboral. Una discusión con Martha Meier precipitó su salida.
Fue despedido además, Alí Alava,periodista de la ahora numéricamente disminuida unidad de investigación. Alava, quien de acuerdo con informaciones de buena fuente, se encontraba investigando al reelecto alcalde Francis Allison, es el tercer periodista despedido de esa unidad, luego de Fernando Ampuero y Pablo O’Brien, que salieron como resultado del caso Petroaudios y del cambio de director, el 2008.
El periodista Juan Zegarra ex editor de Economía -sin asignación específica desde mayo- terminó también su relación con El Comercio (en este caso, para asumir la jefatura de prensa de la campaña presidencial de Alejandro Toledo).
¿Por qué los cambios y despidos? Las razones adelantadas por Paco Miró Quesada, en su correo electrónico del 28 de octubre, no los explican.
Un dato significativo fue el presentado el 21 de julio pasado en una reunión cerrada de jefes y editores realizada en el hotel Sheraton. Ahí se expresó preocupación por la baja en la lectoría y en la venta de ejemplares de El Comercio, incluso en fines de semana, que es cuando el diario vende mucho más (el tiraje del domingo, por ejemplo, triplica el del lunes).
En efecto, la Sociedad de Empresas Periodísticas del Perú, que audita semestralmente la venta neta de ejemplares, registra las siguientes cifras de circulación el fin de semana para El Comercio en Lima entre 2009 y 2010:
Circulación de diarios 2009-semestre 1
Sábado: 147,584
Domingo: 202,684
Circulación de diarios 2010-semestre 1
Sábado: 145,328 ejemplares
Domingo: 188,672 ejemplares
Auditoría 2010-1
Por otro lado, unos estudios de lectoría para manejo interno de El Comercio, realizados por el Media Research Perú (MRP), indican que la lectoría del cuerpo A del diario pasó de 42.1% en octubre de 2009 a 30.5% en setiembre 2010.
A la vez, MRP indica que la lectoría del cuerpo B pasó de 30.3% en octubre 2009 a 27.8% en setiembre de 2010 y llegó a su punto más bajo en agosto 2010 con 18.9%. Las cifras para el cuerpo C en octubre 2009 fueron de 45.8% de lectoría y llegaron en setiembre pasado a 25.6%.
Es en ese contexto que sucedieron los despidos y los cambios, además de las propuestas de reorganización sobre las que está trabajando la consultora catalana. En los hechos, la autoridad de Hugo Guerra y Martha Meier se ha fortalecido en relación directa con una gestión más bien ausente del director, Paco Miró Quesada. Ambos figuran en el organigrama como editores centrales,debajo del director. Guerra se ocupa del diario de lunes a viernes y Meier los sábados y domingos. El consejo consultivo editorial (formado solo por la familia propietaria) ha adquirido mayor importancia.
Respecto de la sustancia de lo que se discute en el Consejo, tres entrevistados por IDL-Reporteros han mencionado que Pablo Llona, por ejemplo, tiene una insistencia peculiar: que no se publique sobre incendios en primera plana porque tiene un vecino pirómano.
Para IDL-Reporteros, no fue fácil contrastar versiones con los directivos de El Comercio. Solo Hugo Guerra concedió una entrevista telefónica el viernes 12 desde la CADE. La vicepresidenta del directorio, Milagros Miró Quesada, no respondió la solicitud de entrevista, que tampoco pudo concretarse con Martha Meier.
Consultado acerca de si había preocupación por la disminución en lectoría y circulación, Guerra respondió:
– Ni una cosa ni la otra. No veo que haya una preocupación, hay tranquilidad, seguimos manteniendo el liderazgo en los sectores a los que nos dirigimos: A, B y C ascendente. Que no se crea que estamos en crisis.
IDL-R: ¿Los cambios de la semana pasada no conducen a cambios editoriales?
Guerra.- Los cambios son simplemente un reforzamiento que en todo periódico sucede. Estamos tratando de mejorar perfiles profesionales, ampliar la agenda temática pero más nada, no hay un cambio sustantivo, no es que mañana vaya a aparecer un ‘Comercio’ totalmente diferenciado al actual.
Ese puede ser, precisamente, el problema.