La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) ha sido la primera institución internacional en pronunciarse horas después de hacerse pública la infundada investigación fiscal por cohecho al director de IDL-Reporteros, Gustavo Gorriti, que implica el levantamiento del secreto de sus comunicaciones telefónicas.
“Preocupa a SIP la indagación contra Gustavo Gorriti y su impacto sobre el periodismo de investigación en el Perú”, ha expresado en X, antes Twitter, la organización que reúne a directores, propietarios y editores de más de 1.300 medios latinoamericanos, entre diarios, canales de TV y radio, y publicaciones nativo-digitales.
La SIP elabora cada año el Índice Chapultepec, un barómetro de la libertad de expresión y de prensa que mide las acciones institucionales en 22 países de la región. Su misión principal es la defensa y promoción de esas libertades.
En el contexto de la “investigación” del fiscal Alcides Chinchay, este viernes el relator especial para libertad de expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Pedro Vaca, ha recordado el estándar supranacional que los Estados miembros de la OEA deben garantizar a los periodistas de investigación.
“Una de las fases más importantes del periodismo es revelar asuntos cuestionables que transcurren a la sombra y que son de interés general. Las democracias deben garantizar la reserva de fuentes y abstenerse de usar el poder estatal para castigar el periodismo de investigación”, ha señalado el relator en su cuenta de X.