“Negocios Secretos”, el reportaje conjunto de IDL-Reporteros y Armando Info, de Venezuela, tuvo importantes repercusiones este lunes 11, en Berlín, Alemania.
En el marco de la investigación mundial Panama Papers, IDL-R y Armando Info revelaron, el pasado 3 de abril, cómo el ex director del Banco Central de Reserva, Francisco Pardo Mesones, y Joerg Baumgartl, entonces alto funcionario de la imprenta federal alemana, Bundesdruckerei, se asociaron para adquirir la offshore Billingsley Global Corp (Panamá) y recibir a través de ella comisiones irregulares provenientes de contrataciones de la entidad alemana con el gobierno de Venezuela.
Siendo Baumgartl funcionario de la Bundesdruckerei, coordinó con Pardo Mesones la intermediación de la offshore Billingsley Global Corp en estos negocios. Desde agosto de 2007, tenía poderes especiales para contratar con Venezuela y Cuba a nombre de esta; aunque había negado tener vínculos con Billingsley bajo declaración jurada en abril de 2014.
Los hallazgos fueron citados, este sábado, por la revista alemana Der Spiegel, que en febrero de 2014 sustentó serias sospechas sobre el desvío de comisiones de parte del funcionario alemán. A pesar de ello, las investigaciones contra Baumgartl no prosperaron en ningún fuero de Berlín. Más bien, fue él quien llevó a juicio a Der Spiegel ante la Corte de Colonia especializada en asuntos de prensa, alegando la falsedad de las denuncias. La Corte, por el contrario, dio luz verde a Der Spiegel para seguir investigando y escribiendo sobre el tema a inicios de 2015.
De otro lado, un ex bróker de la Bundesdruckerei en Venezuela (fuente principal y reservada de Der Spiegel) había denunciado varias veces el caso ante el Ministro de Finanzas, Wolfgang Schäuble, del partido alemán Unión Demócrata Cristiana, de cuya cartera depende la Bundesdruckerei. Hoy, Der Spiegel le reclama a uno de los ministros de finanzas más poderosos de Europa el haber hecho oídos sordos a la denuncia.
Semanario Der Spiegel menciona la investigación Negocios secretos.
Este lunes, la Bundesdruckerei deslindó, a través de su portavoz, con Joerg Baumgartl y alegó que la compañía habría sido engañada por ese funcionario. Pidió a la firma Veridos, subsidiaria de la Bundesdruckerei y donde ahora labora Baumgartl, la suspensión del mismo hasta que se esclarezcan los hechos. Anunció que se «tomarán posibles acciones civiles y penales» de confirmarse las acusaciones tras una investigación fiscal.
“Recién el lunes, tres años después de las primeras publicaciones de Der Spiegel y bajo la presión actual de los Panama Papers, la alta gerencia de la Bundesdruckerei dio marcha atrás. Y se hizo la víctima”, remarcaron, en un artículo de opinión, los periodistas Jürgen Dahlkamp y Jörg Schmitt, autores de la investigación del semanario alemán.
Es evidente que aún resta mucho por esclarecer.