“Los grupos por la libertad de prensa coinciden en que la investigación [fiscal] a Gustavo Gorriti, un reconocido periodista peruano, responde a motivos políticos y es parte de una creciente campaña contra los medios de comunicación”, remarca un destacado artículo del New York Times publicado este lunes 10 de junio pasado.
La nota del NYT se une a la amplia cobertura internacional del caso, sobre el que han publicado recientemente, entre otros, los importantes diarios The Washington Post, The Guardian (del Reino Unido), El País, de España y la agencia mundial de noticias, Associated Press.
Las autoras del informe del NYT, Genevieve Glatsky y Bianca Padró, entrevistaron a periodistas y defensores de la libertad de expresión, quienes sostuvieron que la investigación penal al director de IDL-R “está motivada políticamente” para atacarlo por sus investigaciones periodísticas, en un contexto de “ataques a medios de comunicación independientes en Perú” como parte de “una amplia ola de esfuerzos para censurar a periodistas en países de América Central y del Sur”.

Además, hacen referencia al acoso sistemático de los grupos de extrema derecha que despliegan incursiones violentas y abiertamente difamatorias contra Gustavo Gorriti e IDL-Reporteros fuera de las oficinas de este medio y del domicilio de Gorriti; que se desarrolla en paralelo a la información falsa propalada en medios de la desinformación.
“Los actores políticos utilizan las campañas de desinformación, acusaciones abusivas y propaganda estatal que abiertamente fomenta la desconfianza en la prensa y alienta la polarización”, dijo Reporteros Sin Fronteras a The New York Times.
En los últimos dos años, dice el artículo del NYT, la posición del Perú “se ha desplomado en la clasificación mundial de la libertad de prensa de Reporteros Sin Fronteras. Descendió del puesto 77 al 125, la caída más grande en cualquier país de América Latina”.
Esto refrenda un estudio reciente de Freedom House –una organización que monitorea los niveles de libertad en los países alrededor del mundo–, que indica que la calificación de Perú del año pasado pasó de ser un país “libre” a “parcialmente libre”.